Muchos días me gustaría mirarme como me mira mamá.
Como me mira Bea.
Como me mira Jorge.
Tengo un maestro que me muestra, sin preámbulos, la oscuridad.
Y me invita a pasar casi con violencia.
Me llevó años comprender el por qué lo hace.
Ahora lo sé. Confía en mi.
Me sabe capaz de enfrentarme a mis recuerdos.
Muchos días me gustaría tenerme la confianza que me tiene él.
Me dijiste: «De qué tenes miedo? Solo tenés que mostrarte tal cual sos. Es una verdad tan absoluta, que es irrefutable. No hay comparación. Porque tu verdad es única»
Tan simple, que asusta.
[35mm. Lomo. Posadas, Misiones, Argentina]